El relator especial para la libertad de expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos considera que los medios digitales en Venezuela son fundamentales para garantizar la democracia
Reporte Proiuris
Erick S. González
El relator especial para la libertad de expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Edinson Lanza, fue enfático: el Derecho Penal no debe ser usado para silenciar la labor y, de esa manera, impedir la libre circulación de informaciones y opiniones de interés público.
Durante el taller «Medios y Libertad de Expresión en Venezuela», organizado por la organización no gubernamental Espacio Público en alianza con la embajada Británica y la CIDH, Lanza se refirió a la sentencia dictada por la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) contra el Estado venezolano por la violación de la libertad de expresión en perjuicio del abogado y profesor universitario Tulio Álvarez.
El 23 de mayo de 2003, Álvarez publicó un artículo de opinión en el diario “Así es la Noticia”, titulado “Asaltada Caja de Ahorro de la Asamblea Nacional”, a través del cual se refería a supuestas irregularidades en la administración de los fondos de la caja de ahorros de los trabajadores del Poder Legislativo.
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El 31 de diciembre de 2003, Willian Lara, quien era presidente de la Asamblea Nacional, acusó a Álvarez por el delito de difamación. El 10 de febrero de 2005, el Tribunal Séptimo de Juicio condenó a Álvarez a dos años y tres meses de prisión. Álvarez interpuso los recursos de apelación y, posteriormente, de casación, pero todos fueron infructuosos. Durante el transcurso del proceso penal al acusado se le prohibió salir del país.
Lanza destacó la trascendencia de esta nueva sentencia de la Corte-IDH contra el Estado venezolano, fechada el 30 de agosto de 2019, pues en esta oportunidad el máximo tribunal hemisférico ratificó la incompatibilidad con la Convención Americana sobre Derechos Humanos de la aplicación de sanciones penales que inhiban el ejercicio de la libertad de expresión. «Ha sido una larga lucha», recalcó el relator.
Además del uso artificioso de la legislación penal contra los comunicadores sociales, el relator de la CIDH mencionó otros patrones: agresiones físicas y verbales, hostigamiento e intimidación. Todo ello bajo la mirada complaciente de las autoridades del Estado venezolano.
Sin desconocer el riesgo que implica informar en Venezuela, Lanza insistió en señalar que “cada vez es más necesario un periodismo de calidad para garantizar la democracia», señaló.
Para Lanza, uno de los retos para el continente consiste en vencer la impunidad. “Hay que hacer responsable a los Estados para que la justicia llegue a quienes agreden y asesinan a los periodistas, pues América Latina es una de las zonas con mayor riesgo para el ejercicio del periodismo. No podemos permitir en democracia que presidentes como Jair Bolsonaro (Brasil), Donald Trump (EEUU) o autócratas como Nicolás Maduro en Venezuela traten al periodismo como un trapo de piso», enfatizo.
Destacó que el exilio de periodistas por la persecución del gobierno de Nicolás Maduro ha debilitado la labor de muchos medios de comunicación que han tenido que migrar a las plataformas web. Sin embargo, Lanza elogió los emprendimientos periodísticos digitales en Venezuela, a pesar de las dificultades para lograr un modelo de negocio rentable: «el periodismo de calidad es una garantía para la democracia, y en Venezuela la gente cada vez más se va dando cuenta de que el periodismo digital es creíble».
